El derecho del obrero no puede ser nunca el odio al capital; es la armonía, la conciliación, el acercamiento común de uno y del otro. (José Martí)
El 1ro de mayo, día internacional del trabajador, es una fecha especial que nunca debemos olvidar. Aunque no la celebramos en Puerto Rico, siguiendo la línea de los Estados Unidos de América, a nivel internacional sí se hace. Debe ser una fecha, más que todo, para reflexionar y poner en perspectiva el significado del trabajo, las relaciones obrero patronales y los derechos y responsabilidades de cada parte.
Es meritorio mencionar que la celebración de esta fecha se origina por una lucha de los obreros estadounidenses por una jornada de trabajo de ocho horas. Ésta se fue cuajando durante casi todo el siglo XIX, pero no fue hasta el 1886 que el entonces presidente de los EE.UU., Andrew Johnson, firmó la Ley Ingersoll, que establecía la jornada de trabajo de ocho horas. Luego de esto, 19 estados promulgaron leyes similares.