Por si las moscas...

Los comentarios vertidos en estos escritos son de mi total responsabilidad. Comparto lo que pienso y siento, simplemente para que se pueda apreciar otro punto de vista sobre la cosas. Pueden o no estar de acuerdo con lo que expongo; conmigo no hay ningún problema porque cada quien tiene el derecho a pensar lo que mejor entienda. Los comentarios son bienvenidos. Espero que si alguien difiere, lo haga con respeto; no escribiendo chabacanerías o insultando. Este no es el lugar para eso. ;-)

sábado, 25 de noviembre de 2017

Ese pedazo de tela…



‘Ese pedazo de tela’ se ha convertido en la moda del momento. Está en los autos, en los balcones y en otros lugares. Dicen que es la bandera puertorriqueña, pero yo difiero porque muchos no la tratan como si lo fuera, sino simplemente como un canto de tela.

Y venga, no me creo que soy la que más sabe o quiere la monoestrellada; mucho menos que soy la más puertorriqueña o patriota. Tampoco que soy un ente sensor, ni la inquisición. Lo que pasa es que pienso que si uno quiere algo, le da el mejor trato posible. Pero para quererlo, hay que conocerlo.

Una bandera, según el DRAE, es una ‘tela comúnmente rectangular, que se asegura por uno de sus lados a un asta o a una driza y se emplea como enseña o señal de una nación, una ciudad o una institución’. Han acompañado al hombre desde los inicios de la civilización como distintivos de lo grupos, familias, clanes, etc.

No voy a entrar en la historia o la vexilología. Sería meterme en aguas profundas porque hay muchísimo que contar y no es el objetivo de esta entrada. Sólo voy a decir que las banderas, como las conocemos hoy, tienen su origen en los vexiloides, originarios de los pueblos orientales. De los primeros que las usó en batalla fue Gengis Kan. Algo que después adquieren los ejércitos romanos y que siguió evolucionando hasta lo que tenemos hoy.

Pero volvamos al pedazo de tela; porque eso seguirá siendo mientras no le demos su verdadero valor, no la vemos como lo que es, lo que encierra y lo que representa. En el artículo ¿Por qué son importantes  las banderas?, publicado en el periódico español El País el 5 de julio de 2015 (https://politica.elpais.com/politica/2015/07/01/actualidad/1435706029_139611.html), hace referencia a esto:  
"Hay mucha semiótica escondida en el uso de las banderas que trabaja sobre el inconsciente. Triunfan porque es cierto que provocan grandes emociones en muchos países. Cuando la identidad está en peligro, uno se apoya en la bandera", explica José Enrique Ruiz-Domènec, catedrático de historia en la Universidad Autónoma de Barcelona y autor, entre otros, del ensayo de referencia Europa. Las claves de su historia (RBA).

José Manuel Erbez, bibliotecario en la Universidad de La Laguna y secretario de la Sociedad Española de Vexilología (la ciencia que estudia las banderas), explica por su parte que "a finales del siglo XVIII y principios del XIX nace la necesidad de identificar la nación con un símbolo y así surge la enorme carga simbólica de las banderas". "Cuando la bandera pasa a identificar un colectivo es cuando empieza a tener una carga simbólica más fuerte y más emocional. La gente sigue necesitando identificarse con un grupo y la bandera es un símbolo enorme: es una forma sencilla de expresar una idea muy compleja".

Cuando le damos el valor simbólico y su justa carga emocional, deja de ser un pedazo de tela para representar nuestra identidad, lo que somos, el alma y espíritu puertorriqueño porque encierra toda nuestra idiosincrasia, nuestra herencia cultural y de razas. Deja de ser un pedazo de tela y muestra lo que somos. Se convierte en la bandera puertorriqueña, la monoestrellada.

Cada vez que veo a alguien que no da paso o viola las simples reglas de cortesía en la carretera, grita, se cruza para no dar paso y obstruye a los demás pienso que lo que lleva ‘enganchado’ en el auto no es la bandera, sino un pedazo de tela. Me pregunto si ese comportamiento, entre muchos otros más, encierra lo que somos. Que cada quién se lo conteste.

Es que el patriotismo no se demuestra con sólo llevar la bandera, sino en el respeto y la consideración hacia ella. Existe un reglamento de bandera (http://www.lexjuris.com/Reglamentos/estado/lex955282%20bandera.htm) que deberíamos considerar.

Es importante mencionar que en el Artículo 2  Definiciones, se establece que
(C) La frase "bandera del Estado Libre Asociado de Puerto Rico", incluirá cualquier bandera, estandarte, enseña, insignia, grabado o representación de la misma, sin importar su tamaño, o el material del cual estuviere hecha y que evidentemente tenga por objeto representar dicha bandera. 

Me parece que es imprescindible que le echemos un vistazo a los artículos 26 y 27. El  Artículo 26 Trato respetuoso estipula que: 
(A)  Ninguna persona deberá mutilar, dañar, profanar, pisotear, insultar ni menospreciar con palabras u obras la bandera del Estado Libre Asociado de Puerto Rico. 
(B)  No debe permitirse que la bandera toque la tierra o el piso, o que se arrastre por el agua. 
(C)  Tampoco debe sujetarse, desplegarse, usarse o guardarse en forma tal que se rasgue, se manche, o esté fácilmente expuesta a dañarse. 
(D)  La bandera no debe usarse para cubrir el cielo raso o el techo de un local. 
(E)  Cuando las condiciones de la bandera sean tales que no pueda seguir dándosele uso, se ha de destruir ésta en privado, en forma respetuosa, preferiblemente mediante la incineración. 
(F)  Por ningún motivo deberá usarse una bandera en estado de deterioro, o sea, deshilachada o con colores desteñidos. 
(G)  En los casos en que sea absolutamente necesario lavar la bandera, dicho lavado deberá hacerse en privado y en forma respetuosa. 
(H)  En eventos deportivos que se lleven a cabo en Puerto Rico será responsabilidad de los organizadores de la actividad y/o los administradores del local, velar en todo momento que se le brinde el debido decoro y respeto a las banderas. 
(3 de agosto de 1995, Reglamento Núm. 5282, Artículo  26.)

El Artículo 27 Prohibiciones estipula que:  
(A)  La bandera no debe tejerse ni bordarse sobre cojines, pañuelos o artículos similares; ni ser impresa, ni grabada en servilletas, sean éstas de cualquier material, ni en cajas, ni en ningún artículo que se haya de desechar por inservible. 
(B)  Queda prohibido el uso de la bandera como emblema o insignia de partidos políticos o de candidatos que figuren en la papeleta electoral. 
(C)  Queda prohibido, asimismo, usarla como emblema o insignia en relación con elecciones primarias, elecciones plebiscitarias, referéndum, o cualquier otro tipo de consulta que se haga al pueblo por medios electorales. 
(D)  Las siguientes prácticas quedan prohibidas: 
(1) Estampar, imprimir o en alguna forma hacer figurar alguna palabra o palabras, número, marca, grabado, diseño, o anuncio de cualquier índole sobre la bandera del Estado Libre Asociado de Puerto Rico. 
(2) Desplegar, o hacer desplegar a la vista del público una bandera del Estado Libre Asociado sobre la cual se hubiere impreso, estampado o agregado alguna palabra, número, marca, grabado, diseño, pintura, o anuncio de cualquier índole. 
(3) Desplegar a la vista del público, vender, ofrecer en venta o usar cualquier artículo u objeto que sirva de envase a mercaderías, en el cual se hubiere impreso, estampado, grabado o fijado la bandera del Estado Libre Asociado con el fin de llamar la atención, decorar, marcar o distinguir el artículo u objeto sobre el cual se hubiere impreso, pintado, fijado o estampado la bandera del Estado Libre Asociado de Puerto Rico. 
(4) Ninguna persona deberá emplear la bandera del Estado Libre Asociado de Puerto Rico en ningún tipo de propaganda comercial o con fines de atraer la atención del consumidor. 
(5) La bandera no se usará como parte de, ni se imprimirá en un traje, uniforme, o vestimenta, bajo ninguna circunstancia. 
(6) Queda prohibido utilizar la bandera para arropar, cubrir, vestir o decorar animales, atletas o participantes en espectáculos públicos. 
(3 de agosto de 1995, Reglamento Núm. 5282, Artículo  27.)

Para quererla hay que conocerla y respetarla. Así que cada uno decidirá, de acuerdo al trato que le dé, si lo que portará será un pedazo de tela o la bandera puertorriqueña. Porlo menos yo, me quedo con la monoestrellada.



martes, 21 de noviembre de 2017

El huracán, la crisis y todo lo demás




Lo que nos tocó fue fuerte. El huracán María nos partió por el medio y nos dejó agonizantes. Cierto; pero una cosa es el desastre natural y otra muy distinta todo lo demás. Y de todo lo demás es de lo que quiero hablar.

Una crisis es un acontecimiento inesperado; una situación dificultosa o complicada. Existen diferentes tipos de crisis, ya sea por situaciones personales y problemas empresariales que afectan la imagen y la reputación. También están las de accidentes o desastres naturales; entre otras más.

En las crisis pueden quedar al descubierto muchas cosas, ya sea porque se pierde el control, se acentúan las debilidades o los problemas afloran. Pero también se prueban y validan un tanto más. Si algo ha quedado más que claro con esta crisis, es el importante papel que juegan las relaciones públicas en una sociedad.

El trabajo de las relaciones públicas es desarrollar una estrategia clara, veraz y efectiva. Es informar, educar. Es coordinar y ejecutar. Es actuar. Por eso debe estar en manos de un profesional de la comunicación, un estratega, un relacionista.

Las relaciones públicas es una profesión completa, interdisciplinaria y enfocada en el bien común, que busca construir relaciones mutuamente beneficiosas entre las organizaciones y sus públicos. No es de la ‘Manga Production’. Hay que investigar, planificar, ejecutar y evaluar. 

La respuesta a las crisis se planifican. Uno nunca sabe lo que pueda pasar pero debe tener una guía básica para poder actuar. Si estamos en ruta de huracanes, pues señores, hay que hacer un plan para poder responder a posibles situaciones. Es prepararse para reaccionar efectivamente.

Teniendo eso como base, empiezo diciendo que, luego de sesenta días del paso del huracán María por nuestro país, poco hemos avanzado. Y eso, no es cualquier cosa. Sí, ha sido el huracán más devastador en los últimos cien años y todo lo que quieran, pero no se puede negar que la respuesta no ha sido la mejor.

sábado, 18 de noviembre de 2017

Los medios también tienen su agenda


Caricatura propiedad de Quino.


“Eso es cierto porque lo vi en la televisión”, “Lo leí en el periódico, así que no es mentira”, “Es así porque lo dijeron en la radio”, “Es verdad porque está en las redes sociales”, esas son algunas de las frases que escuchamos a diario y con las que las personas justifican tal o cual información. 

Pero eso no todo es tan fácil ni el mundo es una cascada de colores. Lo primero que tenemos que tener claro es que los medios de comunicación son negocios y tienen sus intereses. También tienen sus líneas editoriales, ideológicas y buscan influenciar la opinión pública y en muchas ocasiones dictarla.

Y que conste, no estoy criminalizando eso; cada quién lleva su negocio como quiere. Lo que sí es que nosotros, los receptores de la información, debemos tenerlo claro. Esto nos ayudará a aprender a filtrar la información, a buscar otras fuentes y líneas editoriales, a comparar, a darle el peso adecuado a lo que se dice y a llegar a las conclusiones por análisis no porque tal o cual medio lo dijo y tengo que creerlo.

En una de las escenas de las películas ‘Wag the dog’, que es una joya en cuanto al tema de la manipulación de la información, el agente de la CIA Charles Young se reúne con Conrad Brean y Winifred Ames. Él les decía que no había ninguna guerra (inventada por Conrad) y que Albania (supuesto país agresor y que habían escogido porque el estadounidense promedio no tenía mucho conocimiento sobre ese país), no tenía capacidad nuclear para atacarlos.

Conrad argumentaba que había salido en la televisión. El agente insistía que no había posibilidad de una guerra y él volvía a mencionar que había salido en la televisión. Como ese ejemplo, muchos.

lunes, 6 de noviembre de 2017

De vuelta a los dramas coreanos



Hace muchos años descubrí los dramas coreanos y he visto como tropecientos. Unos muy buenos, otros regulares y otros pues… de esos también hay. Luego abrí el espectro y acabé viendo dramas de toda Asia. Para ser sincera veo dramas, series, películas, ‘web series’ y lo que aparezca de cualquier parte del mundo.

Llega un momento en que encuentras que muchas historias se repiten, que a lo mejor cambian de protagonistas o de época y poco a poco vas explorando otras cosas. Estos últimos años he estado viendo poco de Corea, aunque cuando llega alguna que encuentro buena o diferente, pues ahí estoy.

Desde hacía bastante tiempo no estaba ‘juqueá’ con un drama coreano. Pero cuando uno no quiere caldo le dan dos tazas, el ‘juqueamiento’ llegó por partida doble. Hay dos dramas -‘My Golden Life’ y ‘Because this is my first life’ -que me tienen otra vez montá en el ‘Korean wave’. Las dos me encantan.