Por si las moscas...

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miércoles, 3 de agosto de 2016

Tae Wang Sa Shin Gi, mi saeguk favorito


Los que me conocen saben que naturalmente y como era de esperarse, Tae Wang Sa Shin Gi (The Legend) iba a ser el primer k-drama, como se le conoce a los dramas coreanos, del que iba a hablar. Este saeguk, telenovela histórica, estuvo protagonizado por uno de los mejores actores coreanos, Bae Yong Joon, y acompañado de las actrices Lee Ji Ah y Moon So Ri; entre un magnífico elenco. La serie de 24 episodios fue transmitida por MBC (Munhwa Boradcasting Corporation), una de las principales cadenas de televisión y radio de Corea del Sur, entre septiembre y diciembre de 2007. 

The Legend (La Legenda), también conocida como The Story of the First King’s Four Gods (La historia de los cuatro dioses del primer rey), mantuvo desde su primer episodio altos números de audiencia y fue ganadora de varios premios. Su producción, que duró casi dos años, se estimó en alrededor de 45 mil millones de won, lo que equivaldría a alrededor de 46 millones de dólares. Aunque ya cuenta con casi siete años desde que fue emitida es una de las más recordadas porque fue la que marcó el regreso de Bae Yong Joon a la pantalla, luego de cinco años de ausencia, y la última que ha protagonizado, porque tiempo después hizo un cameo en “Dream High”, un k-drama que coprodujo.

La música es original de la serie y estuvo a cargo de uno de los grandes genios musicales de Asia, el reconocido director y compositor japonés Joe Hisaishi; que tiene a su haber más de 100 producciones musicales, muchas de ellas bandas sonoras, algunas de las cuales han sido premiadas alrededor del mundo.  Me enamoré tanto de la música de Hisaishi, que no sólo compré la exquisita banda sonora de la serie, que consta de dos CD’s, sino que compré varias de sus producciones. Creo que de más está decir que también compré la serie.




Antes de continuar, quisiera mencionar que los saeguk, más que telenovelas, para mí son series históricas. Y digo esto, porque los romances, los desamores y todas esas cosas que tenemos en las “telenovelas” de este lado son un elemento más dentro de otros tantos. Creo que por eso me gustan tanto. Las conspiraciones, las venganzas, el odio, la política, la corrupción, las luchas por el trono, las guerras, la dominación, la estructura social y  clases sociales; entre otras cosas que mueven la ambición de los hombres por tener el poder, pueden ser el marco donde se desarrolla todo lo demás. Es como una manera de que no se les olvide lo que se vivió antes, de que no se cometan los mismos errores y de mantener fresca en la mente colectiva la historia de su país. Esa es mi apreciación.

La historia me atrapó. La trama gira en torno al decimonoveno rey de Goguryeo, Dam Deok, mejor conocido como Gwanggaeto el Grande. El título de “Grande” sólo se le ha dado a dos reyes; a él y a Sejong, cuarto rey de la Dinastía Joseón y creador del hangúl, el sistema de escritura coreano.

Aunque es la historia de Dam Deok, la serie comienza con la historia mitológica de la fundación de Corea. Hwan Woong, hijo del dios celestial Hwan In, descendió a la tierra para establecer orden, ya que la Tribu del Tigre, liderados por la sacerdotisa Ka Jin, a los que se le había dado el poder del fuego, sometía a las demás tribus porque querían dominar el mundo. Al conocer sus deseos, Hwan Woong le quita el poder del fuego y lo encierra en el corazón del fénix. Él se lo entrega a Sae Oh, de la Tribu del Oso, de la que se había enamorado. Ka Jin, que fue en busca de Hwan Woong porque estaba enamorada de él, se encuentra con que él está enamorado de Sae Oh. Loca de celos decide vengarse. Ataca la tribu del oso en el momento que Sae Oh da a luz al hijo de Hwan Woong y lo secuestra. Sae Oh la persigue, casi sin poder, y llegan hasta un acantilado donde Ka Jin le pide que le devuelva el corazón del fénix o ella tira el niño. Como Sae Oh se niega a darle el corazón del fénix, ella deja caer el niño; lo que hace que Sae Oh pierda el control y se libera el Fénix Negro. Hwan Woong, que había salvado al niño, llama a los tres dioses: el tigre blanco, el dragón azul y la tortuga serpiente para que traten de controlar al Fénix Negro pero es imposible y comienza a destruirlo todo. Así que Hwan Woong, muy a su pesar, se ve obligado a matar a su amada Sae Oh con el arco celestial y recupera el corazón del fénix. Ka Jin se suicidó tirándose por el acantilado. Hwan Woong regresa al cielo, pero antes esconde el poder de los cuatro dioses en cuatro artefactos y se los dejó al cuidado a diferentes personas indicándoles que los cuatro artefactos despertarían cuando naciera el verdadero rey de Joo Shin.

La historia se retoma dos mil años después con el nacimiento de Dam Deok, la reencarnación de Hwan Woong, quien es el verdadero rey Joo Shin.  La noche que nace Dam Deok, en un establo, aparece la estrella de Joseón en el cielo y despiertan todos los dioses. Los monjes de la Villa Guh Mool, cuya misión es matar al Phoenix Negro también ven la estrella y la siguen. Se encuentran con Dam Deok ya nacido. ¿Les recuerda algo? Pues sí, así mismo como lo leen. Esa misma noche nace su primo Yeon Hogae, quien todos piensan que es la reencarnación de Hwan Woong. También ven la señal en el cielo, Daejangro, líder del clan Hwacheon, que eran de la tribu del fuego, y que quieren recuperar el corazón del Fénix. Llegan hasta la casa de la familia de Sujini, que es la reencarnación de Sae Oh y de Kiha, su hermana, que es la reencarnación de Ka Jin. La mamá esconde a Sujini, que es una bebé, con el corazón del fénix en un barril. Los miembros del clan se llevan a Kiha pensando que es la elegida y queman la casa. Sijini se salva porque el corazón del fénix la protege. Cuando los monjes la encuentran, ven que tiene la marca del fénix negro en la frente.  

Los monjes se llevan a Sujini y la crían. Hyeon Go, que resulta ser el guardián de la tortuga serpiente, la toma a su cuidado. La crían en la Villa Guh Mool, pero no la dejan acercarse al fuego y la observan todo el tiempo por que si muestra la señal tienen que matarla. Dam Deok crece con un bajo perfil, Hogae es criado como “el heredero” de Hwan Woong y Kiha, que le borran los recuerdos, es adiestrada en el clan Hwancheon para hacer el mal. Dam Deok se hace amigo de Kiha. Pasa el tiempo. El rey, que no tuvo descendientes, escoge a su hermano, el papá de Dam Deok como rey; y a Dam Deok como el futuro rey. La hermana que no acepta la decisión, trata de hacer todo lo posible por “deshacerse” de todos para que su hijo Hogae, que ella entendía que era la reencarnación del rey Joo Shin, reinara. La mamá de Hogae muere envenenada y hacen responsable a Dam Deok, que nada tiene que ver. El odio de Hogae y de Yeon Garyo, su papá y un político muy influyente hacen que Dam Deok tenga grandes problemas. 

Con el tiempo Dam Deok y Kiha se enamoran. Dam Deok conoce a Sujini y se hacen amigos pasando muchísimo tiempo juntos y Kiha lo resiente porque lo nota diferente y hasta sonriendo. Desde la muerte de la mamá de Hogae, casi no sonreía. El papá de Dam Deok, para protegerlo de Kiha, sabiendo que no podían estar juntos, se mata y hace parece que fue ella la que lo asesinó. Aquí realmente empieza el drama.

¿Verdad que está interesante? Pero como que aquí lo dejo porque falta muchísimo y sería demasiado largo. Pues sólo resta que vean la serie, que es buenísima. No sé, a lo mejor hago una segunda parte para terminar la historia. Pero, lo mejor es que se disfruten la serie, que realmente es excelente. Ya se acordarán de mí cuando la vean. Les aseguro que lo que falta, es lo mejor...


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