La autofoto de los Oscar

Pues sí, me vuelvo a trepar en la sillita después de mucho tiempo. Y no es porque no hubiera temas, es que nada me motivaba a hacerlo. Demasiados conflictos, demasiados enredos, demasiada carga emocional; tanto local como internacionalmente. Así que, por como estaban las cosas, decidí tomarme un respiro; evitando así que me diera un soponcio. Pero esta semana pasada sucedieron par de cosas que me tienen escribiendo otra vez, así que parece que las entregas serán bastante seguidas; porque ya pronto viene la otra. 

Aunque esto fue hace una semana, todavía estoy viendo notas, comentarios, críticas, artículos, análisis, supuestas respuestas de competidores; en fin, de todo. Al final, como que el tema del “selfie” de Ellen DeGeneres en la entrega de los premios Oscar no ha muerto. Hasta la RAE aclaró que en español debe ser “autofoto”. Así de candente ha estado el tema. Pues aquí también estoy yo “hablando” del “selfie”; ¡perdón!, de la autofoto. 

Y es que ya la autofoto de Ellen De Generes en la entrega de los premios Oscar es legendaria. Se puede decir que marca un período. Ahora la referencia puede ser el antes del “selfie” y el después del “selfie”. Así de impactante fue. Y muchos como yo, que ni siquiera vimos la premiación, no pudimos escapar del efecto del “selfie”. 

Desde el momento que lo vi en los medios sociales, especialmente en Twitter, al que siempre estoy conectada, supe que sería algo de lo que se hablaría por mucho tiempo. Y no me equivoqué. Es que las reacciones fueron inmediatas, se retuiteó más de tres millones de veces, superando el tuit del presidente Obama abrazándose a su esposa el día que asumió su segundo término como presidente de los EE. UU. Así las cosas, el tuit de Ellen estableció un nuevo récord. La verdad es que estuvo genial, ¿dónde se podría tener una foto con tantas personalidades del cine juntas? 

Y claro, las críticas, pero las otras, las destructivas, no pudieron faltar. Inmediatamente corrieron ríos de tinta criticando a la gigante coreana “dis” que por lo que le costó, que no fue algo espontáneo, etc.; que si tal o cual cosa. ¡Señores!, el que conoce, sabe que en ese tipo de premiaciones hay poco margen para la improvisación; que se sigue un libreto y que todo está bien planificado. ¿Entonces, por qué tanto revuelo? Porque los coreanos de Samsung, con esto de la autofoto “la pusieron en la China”, como decimos nosotros. Parece que lo que le duele a muchos es que no se les ocurrió a ellos; y eso, podría ser el trago más amargo y lo más difícil de superar.

Muchos indicaron que el teléfono de Ellen es un iPhone que eso estuvo arreglado; etc.; que sin el acuerdo comercial no hubiese usado el Samsung; etc. Pues bien, podría ser eso y mucho más, pero la autofoto que estuvo viral y que rompió el récord fue la tomada con el Samsung, no una tomada por el iPhone. ¿Estamos viendo de qué va la cosa? Y hay que reconocer que la estrategia fue muy buena. Y que eso fue excelente para la marca. Y que conste, ni uso la marca ni el modelo. 

Días más tarde, se alegó que la competencia, la gigante estadounidense, contraatacó con un tuit, que se convirtió viral, felicitando a Jared Leto e indicándole que hubiese salido en la fotografía -que casi no se ve en la autofoto de Ellen- si la misma hubiese sido tomada con un iPhone. Pues resulta que la tan cacareada foto no fue generada por Apple. Muchos de los conocedores analizaron el tuit y encontraron varios errores demostrando así que la compañía nada tuvo que ver con eso. Como por ejemplo, que el nombre del teléfono está mal escrito (la i está en mayúscula). Así que mis amigos, antes de darle “retuit” a cualquier cosa que veamos en los medios sociales, verifiquemos las fuentes, porque podríamos estar dándole exposición a algo falso.

Y esta no es la primera autofoto que se hace, ni que se vuelve viral. Ya hemos leído bastante sobre los “selfies”, entre ellos el que se tomaron varios dignatarios durante los funerales de Mandela. Así que de nuevo, no tiene nada. Lo que sí es que Samsung tuvo la visión y creó el “momentum” porque fue en el lugar justo, en el momento justo, con las personas justas y orquestado por la persona indicada. Así que, como decimos en el argot pueblerino, Samsung “sacó la bola del parque”. Excelente estrategia la utilizada; eso no se puede negar. Y no me extrañaría que ahora alguna compañía buscara hacer algo similar; pero hay que reconocer que va a ser difícil de igualar. 

Posteriormente vimos varios “selfies” inspirados en el de la noche de los Oscar. Y tengo que compartir uno de los mejores, sino el mejor que vi, y que fue tomado por un grupo de amigos durante la transmisión de los Oscar. La verdad es que les quedó sensacional porque fue espontáneo y tan genial como el original. Aquí lo comparto porque merece que sea apreciado. Cuando la vi me encantó.  Tengo que volver a decir, que me pareció genial. A ellos lo que les faltó, fue la pizza.

Nada, que ahora tenemos que estar pendientes a ver qué otra estrategia se le ocurre a alguna compañía para dar a conocer sus productos. Y no me extrañaría para nada que ya se esté “cocinando” lo que van a hacer para la entrega de los Oscar del 2015. Esto recién empieza. Busquemos las palomitas de maíz para ver la función, porque esto se pondrá cada vez más interesante.   

Y antes de terminar, tengo que decir que todo este revuelo y el éxito de la autofoto se debe, en gran medida a Ellen DeGeneres. A nadie le iba a quedar tan bien como a ella. Y es que Ellen, además de ser una excelente presentadora y una de las querendonas del público estadounidense; tiene un sentido del humor genial. A mí me encanta y siempre acabo riéndome con sus cosas. 

Y algo sumamente importante y que no se debe obviar. Detrás de esta excelente iniciativa, sin ninguna duda, hay profesionales de la comunicación, de las relaciones públicas, de la publicidad y del mercadeo. El que piense que esto fue algo fortuito, más equivocado no puede estar.  Claro, a lo mejor resultó mejor de lo que esperaban pero este es el resultado de algo bien pensando, desarrollado y ejecutado. Por eso es que siempre digo que zapatero a su zapato. El "selfie" de los Oscar se ha convertido en uno para la historia, que estoy segura se discutirá en los cursos de comunicación y que seguirá dando muchísimo de qué hablar. Las ideas, bien desarrolladas, bien trabajadas y bien ejecutadas funcionan…